Medicinal

2025-09-03 12:33:48

El sistema endocannabinoide y el cannabis: qué es y cómo actúa para tu bienestar

El cuerpo humano tiene un sistema propio que regula el sueño, el apetito, el dolor y el ánimo. Descubierto en los años 90, el sistema endocannabinoide explica por qué el cannabis se conecta con nuestro organismo y puede contribuir a nuestro bienestar.

Quizás “sistema endocannabinoide” suene complicado. Puede parecer algo reservado a científicos, pero en realidad es un mecanismo natural que funciona en vos todos los días. Cuando dormís mejor después de una jornada agotadora, cuando recuperás calma tras una situación de estrés o cuando el cuerpo controla una inflamación, ahí está trabajando este sistema. ¿Todavía no entendés bien? No pasa nada: no está guardado en laboratorios. A continuación te explicamos con detalles.

El descubrimiento llegó en los años 90, cuando el investigador Raphael Mechoulam y su equipo encontraron que el cuerpo humano produce moléculas muy parecidas a las del cannabis. Esas sustancias, llamadas endocannabinoides, encajan en receptores distribuidos en el cerebro, en el sistema nervioso y en el sistema inmune. Todo ese conjunto es lo que hoy conocemos como sistema endocannabinoide, una red interna que regula procesos esenciales y que se activa también cuando consumimos cannabis.


Cómo regula el bienestar


Este sistema no se limita a calmar el dolor o generar relajación. Su función es más amplia: ajustar la intensidad de múltiples procesos para que el cuerpo se mantenga en equilibrio. Regula apetito, memoria, sueño, respuesta inmune y ánimo. En otras palabras, trabaja silenciosamente para sostener nuestro bienestar.

Los receptores CB1 se concentran en el cerebro y controlan aspectos como la percepción, el apetito o el estado de ánimo. Los CB2 actúan sobre el sistema inmunológico y la inflamación. Los endocannabinoides naturales —como la anandamida— se producen en momentos puntuales, por ejemplo tras una situación de estrés, ayudando al organismo a recuperar estabilidad.

Cannabis y sistema nervioso central


Cuando consumimos cannabis, sus compuestos interactúan con esos mismos receptores. El THC se conecta principalmente con los del cerebro, produciendo efectos como relajación, euforia o cambios en la percepción. El CBD, en cambio, modula la respuesta del sistema, ayudando a equilibrar la actividad sin generar alteraciones psicoactivas.

En la práctica médica, existe una categoría conocida como aceite de espectro completo. Se trata de extractos que contienen no solo THC y CBD, sino también otros cannabinoides y terpenos presentes en la planta. La combinación permite un efecto más equilibrado y sinérgico, conocido como “efecto séquito”, que puede ser útil en casos de epilepsia, ansiedad o dolor crónico.

Un puente hacia la medicina moderna


El sistema endocannabinoide muestra que el cannabis no es un elemento extraño: habla el mismo lenguaje químico que nuestro cuerpo ya utiliza. Por eso tiene potencial para aplicarse en diversas condiciones de salud. Se investiga su rol en enfermedades neurodegenerativas como Alzheimer, en trastornos del ánimo como la depresión y en patologías relacionadas con la inflamación crónica.

Cada hallazgo fortalece la idea de que este sistema es esencial para la salud integral y no un engranaje secundario. Su función principal es favorecer el equilibrio, y allí es donde el cannabis encuentra un papel clave.

Paraguay y los marcos de acceso


En Paraguay, la Ley 6007/17 regula el cannabis medicinal a través del PROINCUMEC, mientras que el artículo 30 de la Ley 1340/88 permite la tenencia de hasta diez gramos con receta médica o para uso personal. Además, en hospitales públicos se ofrecen aceites medicinales de forma gratuita para pacientes que cumplen con los requisitos.

Por fuera del circuito oficial, también existen productos de THC (con más de 0,5% de THC) que se comercializan como suplementos, y un mercado artesanal que ofrece aceites medicinales elaborados por asociaciones y emprendedores. Esto abre distintas alternativas de acceso en un país donde la discusión sobre cannabis medicinal sigue avanzando.

A diferencia del alcohol, que no tiene receptores propios en el cuerpo y cuyo efecto se debe a una acción difusa sobre varios neurotransmisores, el cannabis se conecta con un sistema diseñado para regular funciones vitales. Esa es la gran diferencia: mientras el alcohol suele dañar células y órganos, el cannabis se acopla a un engranaje natural que puede favorecer el bienestar cuando se usa de manera adecuada.

El sistema endocannabinoide es, en definitiva, la base biológica que conecta al cannabis con nuestro bienestar. Entenderlo permite dejar atrás prejuicios y ver en la planta no solo un símbolo cultural, sino una herramienta de salud.


Fuentes consultadas:

-Raphael Mechoulam, Discovery of Endocannabinoids and Their Role (1992).
-National Academies of Sciences, The Health Effects of Cannabis and Cannabinoids (2017).
-Crippa, J. et al., Cannabis and Anxiety: A Critical Review. Frontiers in Psychiatry, 2018.
-Ley 6007/17, Paraguay.
-Ley 1340/88, art. 30, Paraguay.